Recuerdo perfectamente el día que decidí que me dedicaría a la sanidad, tenía 12 años, desde hacía tiempo me había empezado a llamar la atención todo lo relacionado con hospitales, ambulancias…
A los 17 años ya era técnico en cuidados auxiliares de enfermería. Mi curiosidad y vocación creció, así que unos años más tarde estudié Técnico superior en imagen para el diagnóstico y Técnico en emergencias sanitarias. En todos estos años en los que he pasado por diferentes unidades, plantas y hospitales he tenido la oportunidad de conocer a muchos pacientes y familias, cada uno de ellos me ha enseñado unos valores tanto en las despedidas como en la llegada de un nuevo miembro a la familia. Formar parte del equipo Creciendo es la oportunidad de seguir construyéndome como persona y como profesional por sus valores y filosofía. Siempre desde el respeto a las mujeres, familias y a los más pequeños.